Espacio oblicuo
nosotros y sábanas inclinadas
sabiendo que nada es para siempre
que todo es efímero y se escurre
como una vez dijiste
Espacio turbio el nuestro
donde me descubro torpemente turbia
ante ti
tú, que eres tan imperturbable
ante mi
yo, que permanezco
boca sellada
Espacio en el que quiero verte
reconcomiéndonos las ganas
del no estar en otro lugar
más que en
éste.
PD: la entrada anterior fue la 100. Parece como si hubiera cruzado una línea finísima cuando emprendí el poder de la palabra.