miércoles, 9 de marzo de 2011

Lamento lento



Me he acordado de él antes de acostarme, en uno de mis primeros libros de poesía:

En la noche del corazón
la gota de tu nombre lento
en silencio circula y cae
y rompe y desarrolla su agua.

Algo quiere su leve daño
y su estima infinita y corta,
como el paso de un ser perdido
de pronto oído.

De pronto, de pronto escuchado
y repartido en el corazón
con triste insistencia y aumento
como un sueño frío de otoño.

La espesa rueda de la tierra
su llanta húmeda de olvido
hace rodar, cortando el tiempo
en mitades inaccesibles.

Sus copas duras cubren tu alma
derramada en la tierra fría
con sus pobres chispas azules
volando en la voz de la lluvia.


Neruda.

3 comentarios:

  1. Muy bien traído Neruda.

    Me ha sorprendido también gratamente tu referencia a mi admirada Anna Ajmátova (junto con Maiakovski uno de mis poetas rusos favoritos, por aquello de mis pasiones por escritores comprometidos con su tiempo y de vida torturada y trágica. Aunque claro, ahora que lo pienso, ser ruso y escritor ya te predispone para una vida torturada y trágica).

    Te recomiendo un libro que trata un poco sobre todo esto: Los exiliados románticos de E.H. Carr, un libro que novela la biografía de un grupo de intelectuales exiliados rusos románticos y un pelín ácratas que a finales del s XIX camparon por Europa.

    "Voy hacia nunca, hacia ninguna parte,
    como un tren sobre el abismo"

    Spasíva.
    Patzeluí.

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  2. gracias por la recomendación, apuntado queda :)

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  3. En qué antología fue publicado este poema?

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